Podemos recomendarle a AMLO un spot con Lady Wuuu. Imagínense a alguien peguntándole a Lady Wuuu lo siguiente: “¿Y tú qué crees que podría hacer Andrés Manuel por nuestro país?”. Obvio, ya conocemos la respuesta: “¡Ay, pues muchas cosas… wuuu!”. ¡Sería un súper hit, por encima del indito Yuawi!

En un gesto de suprema hipocresía, Natalie Portman ahora se queja de la “sexualización” de la que fue “objeto” en El perfecto asesino y de la “sexualización” a la que son “sometidas” las actrices gringas. Obvio, ya se trepó al tren del #MeToo y del Time’s Up, estas campañas mediáticas de la paranoia feminista en el ámbito farandulero.

Si un político está creciendo, hay que seguir estimulándolo. Debe ser el caso de Chertorivski. Y el mejor lugar para él sin duda que es el Senado de la República. Un joven tecnócrata con visión social calzaría muy bien en la Cámara Alta.

Alejandra Barrales ya ganó la candidatura para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México por parte de la Coalición “Por México al Frente”, pero la ganó sólo para perder ante Claudia Sheinbaum, la segura candidata de la Coalición “Juntos Haremos Historia”, integrada por MORENA, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Encuentro Social (PES).

Hay que tener un poco de decoro, para llamar a las cosas por su nombre. Condenemos y castiguemos todos los casos comprobados de acoso sexual, sin duda. Y reprobemos la hipocresía de querer considerar como “acoso sexual”, el día de hoy, los actos de prostitución del pasado.

Como una bocanada de aire fresco nos llegó, desde mi querida Francia (nunca dejaré de ser Le Moine), el manifiesto elaborado por varias personalidades del país galo contra la paranoia feminista del aborrecible #MeToo de origen gringo.

El manifiesto de las mujeres francesas es muy bueno porque, primero, exhibe el reduccionismo maniqueo de la mitología feminista y, después, rechaza la sinrazón que se halla detrás de la estrategia mediática que conecta al #MeToo con el Time’s Up.

A mí, todo este rollo de la paranoia feminista en el ámbito farandulero siempre me ha parecido, a manera de hipótesis, una convenenciera resignificación de viejos actos de prostitución para conseguir papeles. Y miren que yo no tengo nada contra el negocio de la prostitución de carácter privado y empresarial, pero la hipocresía me parece aberrante.

Lo que no podemos obviar es que AMLO ya está viejo y cansado. ¿Le han dado seguimiento a sus más recientes presentaciones en público? Da lástima y pena ajena. AMLO es un anciano desgastado, jadeante, sin energía, balbuceante. Queda claro que su salud no es buena y que su cuerpo se halla en franca decadencia. Hasta le cuesta trabajo subir escaleras y articular discursos.

AMLO criticó la actual estrategia de seguridad pública y prometió reducir la delincuencia con base en el crecimiento económico, la generación de empleo y la aplicación de programas de desarrollo social. Y, para acabar con el narcotráfico, a todo lo anterior habría que sumar la amnistía a favor de los narcos arrepentidos… ¡y en tres años estamos en el paraíso!

La mitología feminista ha trabajado de la mano con el rollito “anti-discriminación” para influir perniciosamente en el mundo social, político, jurídico y cultural, dando pie a las más infaustas, inútiles y costosas ocurrencias. Para ejemplos, el mundo del lenguaje.

Hoy en día tenemos que soportar esa magna idiotez llamada “lenguaje incluyente”, que también ha sido llamado “lenguaje inclusivo o no sexista”, mismo que ha llegado a extremos ridículos.